the hemingway's chronicles

¿qué quieren que les cuente? mucha lectura, mucha lectura, mucha lectura. harto de la teoría postcolonial, harto de las cuestiones de raza en américa latina, harto de ser torturado. sobre todo harto de mí mismo, supongo, y por supuesto harto de no tener todavía computadora en casa.

los cursos que estoy tomando son buenísimos. john con su habitual calidad, que no es tan constante como debería porque él mismo no quiere, pero que cuando brilla lo hace con luz propia. reid y shalini, magníficos, salvo (para mí) por su insistencia en sobrevalorar la participación en clase. a mí no me gusta hablar, ni siquiera en las clases que son en español, menos en las que son en inglés. luego voy a hemingway's y me paso una hora conversando con lizardo de postcolonialismo y todo eso, porque así sí hablo y mucho, pero en clase como que no me lanzo.

las clases que doy, bien, al menos creo que bien, parece que los chicos (en realidad las chicas) están entendiendo todo, incluso la diferencia entre pretérito e imperfecto con la que los gringos tienen tanto problema. la próxima semana tienen un quiz al respecto: ahí los quiero ver. ayer y hoy decidí subir mi cuota de popularidad y les di un pequeño descanso. el semestre pasado quedé convencido de que a estos niños hay que ponerles películas: entonces sólo puse nueve reinas, casi al final del curso, y fue todo un éxito. este semestre he decidido poner tres o cuatro pelis (en reemplazo, básicamente, de las secciones de 'cultura' que vienen al final de cada lección en el libro) de modo que ayer y hoy comencé con abre los ojos de alejandro amenábar. un éxito, también. en realidad quería ponerles nadie conoce a nadie, más que nada debido a que en este capítulo del libro estuvimos hablando de las fiestas y allí asomó, desde luego, nuestra católica semana santa, y esa peli está ambientada en sevilla y en la más exagerada semana santa que existe. pero la tengo en formato europeo, y los dvd-players que tenemos aquí en las aulas no leen más que región uno, así que nanay. luego pensé en tesis, pero me pareció un poquitín demasiado escabrosa, y además muy larga. la segunda peli de amenábar tiene la duración justa, cincuenta minutos una clase y cincuenta y cinco la otra, y encima está partida por la mitad por un fundido en negro que al final se revela como algo más que un recurso formal. lo único malo es que un par de los chicos ya habían visto vanilla sky, mediocre copia gringa de abre los ojos con tom cruise a la cabeza y penélope cruz repitiendo papel, pero qué le vamos a hacer. mis otras candidatas para el semestre son nueve reinas, otra vez, y tal vez amores perros si me animo a gastar tres clases en una peli. pensé en y tu mamá también, que a mí me gusta más que amores perros y encima tiene también el tiempo exacto que necesito, pero se me ocurre que hay demasiado sexo (y, al final, sexo digamos que problemático) como para ponerla en una clase de español. ratas, ratones, rateros no me parece a la altura (aunque la vi hace poco por segunda vez y me gustó mucho más que la primera) y tesis, aunque me decidiera a obviar el tema de la violencia excesiva, está descartada, al igual que nadie conoce a nadie, porque tampoco quiero convertir esto en un monográfico sobre eduardo noriega (o sobre amenábar). se admiten sugerencias*.

by the way, vi por fin mar adentro, y el amenábar 'social' me gustó bastante menos que el que sólo pretendía entretenernos.

esta noche tenemos una cena en casa de jungwon y gerardo, para comer algo de pasta que va a preparar este último pero sobre todo para hacerle los honores a una botella de buen tequila que el mismo personaje se trajo de sus vacaciones en méxico. aparte de eso, poca vida social últimamente, el sábado pasado hasta rechacé una invitación a una fiesta para quedarme en casa leyendo... triste pero cierto. ahora bien, mi última visita a hemingway's salió muy rentable, porque pude corregir un error de mi vida sevillana: siempre me arrepentí de no haberme comprado una camiseta de la bruja (si mal no recuerdo costaban apenas mil pelas). gracias al gran chet, nuestro camarero habitual en hemingway's, ni siquiera tuve que pagar para obtener una camiseta como las que lleva el personal del bar. le dije: "how can i get one of these t-shirts?" y él, ni corto ni perezoso, se metió al área de la cocina y salió al rato con una flamante camiseta negra de hemingway's (patrocinada, eso sí, por miller lite, probablemente la peor cerveza del mundo).

uno que tiene sus contactos.

*: por favor, flaco, sugerencias aptas para gente normal.