por si se lo perdieron
mi ñaño me contó que vio de cabo a rabo la ceremonia de entrega de los premios de la academia, pese a la diferencia horaria, en un alarde de heroísmo que un par de veces ensayé yo también cuando vivía en españa (nunca con demasiado éxito: hay que ser muy heroico para llegar sano y salvo hasta las seis y pico de la mañana, sobreviviendo a una serie de galardones menores e interpretaciones musicales olvidables, en el afán de poder ser testigo, finalmente, del desenlace en las categorías que cuentan).
y sí, fueron los oscars de marty, al fin reconocido, a destiempo sin duda, por una academia desprestigiada desde hace años, si no décadas, que sin embargo logra siempre mantener el glamour de la que sigue siendo, al fin y al cabo, la noche más importante del año en el mundo del cine. fue un momento muy emotivo, si bien al parecer más para el resto del personal que para el propio scorsese, quien se veía menos emocionado con su estatuilla que cuando se la dieron a su editora habitual, thelma schoonmaker, aquella que tocara el cielo en goodfellas allá por 1990.
yo cada vez me creo menos eso de que ni el presidente de la academia sabe de antemano la identidad de los ganadores. cuando lo del triunfo de pedro almodóvar... ¿quiénes entregaron el premio? antonio banderas y una gritona penélope cruz. ahora marty recibe el dorado hombrecillo nada más ni nada menos que de manos de... los tres amigos: francis ford coppola, steven spielberg y george lucas (este último, por cierto, genial, riéndose de sí mismo como sólo un multimillonario puede hacerlo, y es que ya me dirán ustedes si el tipo va a extrañar un oscar en su estantería siendo el creador de, quizá, la peli más influyente, según muchos para mal, de los últimos treinta años). too much of a coincidence to be a coincidence.
los que el país denominó los oscars más hispanos de la historia, que en realidad si eran algo eran más bien los más mexicanos, no lo fueron tanto al final: se esperaba más de el laberinto del fauno y de babel. excesiva genuflexión general ante al gore, para mi gusto, pero fue divertida la broma de dizque empezar a anunciar la candidatura para ser interrumpido por la música como les pasa con sus discursos de agradecimiento a tantos desgraciados de las categorías inferiores. ellen degeneres (me encanta esta mujer) estupenda, como de costumbre, aunque sin pasarse de la raya porque así mismo es esto. jerry seinfeld y george clooney, los mejores presentadores de la noche, clint eastwood el peor. en fin, todo bien, pero para mí lo mejor fue, sin duda alguna, la serie de numeritos de danza escultural/sombras chinescas con que la compañía pilobolus representó de forma muy original happy feet, the departed, the devil wears prada y otras pelis del año. aquí les dejo el vídeo para ver si alguien me explica cómo hace esto esta gente:
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